Por Culinaria Mente
Los nuégados son un dulce tradicional de Guatemala de sabor único y textura suave, preparados con ingredientes locales y una técnica sencilla, perfectos para compartir con amigos y familiares en cualquier ocasión especial.
¿Cómo preparar nuégados?
La receta requiere mezclar harina con miel y especias, formar pequeñas bolitas,y luego freírlas hasta que estén doradas, siendo la clave no sobrecocer para conseguir la textura perfecta.
Información nutricional
Cada ración de nuégados contiene aproximadamente 400 kcal, 16 g de grasas totales, 2 g de grasas saturadas, 0 mg de colesterol, 60 g de carbohidratos, 1 g de fibra, 30 g de azúcares y 120 mg de sodio.
Receta de nuégados guatemaltecos
Preparación: 20 minutos
Cocción: 10 minutos
Raciones: 5 personas
Ingredientes
- 2 tazas de harina de trigo
- 1 taza de miel
- ½ taza de azúcar moreno
- ½ taza de agua
- ½ cucharadita de canela
- Aceite vegetal para freír
- Polvos de hornear
Instrucciones
- En un bol grande mezclar la harina cernida, 1 cucharadita de polvos de hornear y la canela. Reservar
- En una cacerola, calentar la miel con el azúcar moreno y el agua a fuego medio, revolviendo constantemente hasta que el azúcar se disuelva completamente y la mezcla empiece a hervir. Retirar del fuego y dejar enfriar ligeramente.
- Agregar la mezcla de miel al bol con la harina, mezclar hasta obtener una masa homogénea, formar pequeñas bolitas con la masa y aplanarlas ligeramente.
- Calentar el aceite vegetal en una sartén a fuego medio-alto y freír los nuegados en el aceite caliente hasta que estén dorados y crujientes, aproximadamente 2 a 3 minutos por cada lado. Retirar del aceite y escurrir sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Dejar enfriar antes de servir.
Origen de los nuegados
Su origen histórico se remonta a la fusión de las culturas indígena y española, particularmente los buñuelos, con el nombre «nuégados» derivado del término español «nuegado», que significa sumergido.
¿Sabías qué?
La repostería moderna en Guatemala se remonta a 1524 cuando los españoles trajeron sus preparacones al continente americano, con las órdenes religiosas españolas popularizando el cultivo de caña de azúcar y la elaboración de dulces.